Katy Perry pasará el cumpleaños de su hija Daisy en un lugar muy distinto al que cualquiera imaginaría: en un tribunal.

Según informó Bloomberg, la cantante de 40 años deberá declarar en Los Ángeles el 26 de agosto, fecha en la que su hija Daisy Dove Bloom cumplirá 5 años. El motivo es una disputa legal que lleva años en curso y que involucra la compra de una propiedad valuada en 15 millones de dólares en Montecito, California.

El conflicto comenzó en 2020, cuando Perry y su pareja Orlando Bloom adquirieron la mansión de ocho habitaciones y once baños al empresario de 89 años Carl Westcott. Poco después, Westcott presentó una demanda alegando que no estaba en condiciones de firmar el contrato debido a problemas de salud relacionados con el Alzheimer y los efectos de una cirugía.

Los representantes de Perry han sostenido que la venta fue completamente legal y que el contrato tiene plena validez. La cantante y Bloom remodelaron la propiedad y desde entonces la utilizan como residencia familiar.

En 2023, un juez dictaminó que el contrato era vinculante, pero el caso se mantuvo abierto para resolver los reclamos financieros. Ahora, el juicio oral tiene como eje las compensaciones económicas, ya que la familia de Westcott busca anular la venta o recibir una suma millonaria en resarcimiento.

La citación obliga a Perry a presentarse a testificar justo el mismo día en que su hija Daisy Dove, fruto de su relación con Bloom, celebrará su quinto cumpleaños. Una coincidencia que la artista difícilmente hubiera deseado, pero que vuelve a ponerla en el centro de una batalla legal que parece no tener fin.