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Inspiración de Florencio Varela
“Pierde el que no intenta, gana el que persevera”: la trayectoria de Sabry, modelo y bailarina
La joven de Florencio Varela combina su carrera universitaria con el modelaje y la danza. A los 23 años, asegura que su sueño es ser una referente artística y que la edad nunca debe ser un límite: “Pierde el que no intenta, gana el que persevera”.
A los 23 años, Ruidias Sabrina (o Sabry, como le gusta que la llamen) combina su carrera universitaria con su pasión por el modelaje y la danza. Desde Florencio Varela, la joven se abre paso en el mundo artístico con una convicción que inspira: “La edad no es un obstáculo; gana quien persevera y lucha por sus sueños”.
Desde pequeña, Sabry siempre sintió una conexión especial con las cámaras. “Mi mamá me llevaba a un fotógrafo profesional, y me encantaba posar”, recuerda. Pero su verdadera oportunidad llegó este año, cuando participó en un casting de la agencia RC (Rodrigo Cáceres), realizado en el Museo Comunitario de Artes Visuales e Histórico de Florencio Varela.
Aunque en esa primera experiencia no fue seleccionada, no bajó los brazos: “Cuando vi que abrían inscripciones para estudiar modelaje, me anoté enseguida. Amo esto. Modelar no es solo caminar por una pasarela, sino formar tu propia esencia, seguridad y confianza”.
Esa perseverancia la llevó a vivir experiencias que considera fundamentales para su crecimiento. La más destacada, cuenta, fue su paso por el Certamen Modelo Revelación 2025, donde aprendió el valor de la disciplina y la superación personal. “Fue una experiencia hermosa, cada momento me enseñó algo nuevo”, afirma.
Además del modelaje, Sabry cultiva otra de sus grandes pasiones: la danza. Participó en diversos concursos donde exploró estilos y conceptos distintos, y reconoce que esa mezcla de arte y expresión corporal es parte esencial de su identidad.
A la hora de hablar de sus referentes, sorprende con una combinación única: Jennifer Garner y el grupo surcoreano BTS. De la actriz de “Como si tuviera 30”, rescata la enseñanza de que “la verdadera belleza viene de adentro”; mientras que del grupo de K-Pop tomó inspiración desde los 14 años: “De ellos aprendí a no rendirme pese a los obstáculos, a valorarme y a entender la importancia de la amistad”.
Fuera de los flashes, Sabry dedica su tiempo libre a escuchar música, practicar coreografías, repasar pasarela y crear maquillajes artísticos, una faceta que planea mostrar pronto en redes. “Me encanta jugar con los delineados y los colores, es otra forma de expresión”, cuenta entusiasmada.
Sus metas son tan claras como sus valores: terminar su carrera universitaria en Administración, finalizar su traductorado de inglés y consolidarse como una referente en el modelaje y la danza.
Pero lo que más la define es su mensaje final, una declaración de principios que resume su espíritu: “Sean libres de expresarse como más les guste. El tiempo y la edad no deben detenerlos. Pierde quien no intenta; gana quien persevera. La edad es solo un número: la esencia, la autenticidad y la humildad son lo que importa. Sé vos mismo y dale para adelante.”
